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Explorando el Mundo de las Achiras del Huila: Más Allá del Sabor en un Viaje Lingüístico. Colombia, tierra de sabores cautivadores, nos ofrece no solo exquisitos manjares, sino también fascinantes conexiones entre la lengua y la cultura. Las Achiras del Huila, esas deliciosas galletas crujientes, no solo son un festín para el paladar colombiano, sino que también nos llevan a un viaje lingüístico, revelando significados sorprendentes en otras partes del mundo. ¿Sabías que las Achiras tienen denominación de origen? ¡Descúbrelo aquí! Achiras del Huila: Un Placer Culposo. Originarias del hermoso departamento de Huila, las Achiras del Huila han conquistado los corazones de los amantes de los snacks en Colombia. Con su crujiente textura y sabor mantequilloso,, estas galletas son una delicia que se celebra en festividades y momentos especiales. Pero, ¿sabías que el nombre «achira» tiene interpretaciones interesantes en otros lugares? Achira en Japón: Por Allí en el País del Sol Naciente. En Japón, la palabra «achira» se utiliza para indicar dirección, significando «por allí» o «en esa dirección». Así, mientras en Huila disfrutamos de Achiras en la mesa, en Japón, «achira» podría señalar el camino hacia nuevas aventuras. Fuente Achira en Corea: Brillante, Claro e Inteligente. En Corea, la palabra «achira» adopta una connotación diferente, refiriéndose a algo «brillante, claro e inteligente». ¿Quién habría imaginado que una simple galleta compartiría su nombre con tan elogiosas características? Achira en Quechua: Un Estornudo Lingüístico. En la rica diversidad de las lenguas indígenas, el quechua nos presenta otro matiz para la palabra «achira». En este contexto, «achira» se asocia con la acción de estornudar. Un giro sorprendente que destaca cómo las palabras pueden tejerse en el tapiz cultural de manera única. Más Allá de lo Culinario. Descubrir los significados de «achira» en distintas lenguas agrega una capa de riqueza a la experiencia de disfrutar estas galletas colombianas. No solo nos deleitamos con su sabor, sino que también exploramos las maravillas de la lengua y la diversidad cultural. Así que la próxima vez que saborees una Achira del Huila, recuerda que estás degustando más que una galleta. Estás experimentando la conexión entre sabores, palabras y culturas, un viaje que nos recuerda lo interconectado que está el mundo a través de la comida y el lenguaje. ¡Buen provecho y que tu experiencia sea tan diversa como las interpretaciones de «achira» en todo el mundo!

Achiras del Huila, con sus irresistibles productos, ha encontrado en Farmatodo el aliado perfecto para llegar a todos los rincones del país. Con 100 tiendas a nivel nacional, en 12 departamentos y 19 municipios, Farmatodo se presenta como el socio ideal para que disfrutes de nuestras Achiras originales, almojábanas crocantes y la emocionante llegada próximamente de las Achiras picantes. Farmatodo, con su amplia cobertura y presencia estratégica, no solo se limita a ser una cadena de droguerías. También se ha convertido en un destino integral donde encuentras todo lo que necesitas, incluyendo una variedad de alimentos. Origenes de Farmatodo Con más de 104 años de existencia, Farmatodo, originalmente conocida como Droguería Lara, ha construido una historia de lo posible. Fundada en 1918 por Rafael Zubillaga Perera y José Luis López Morandi como Farmacia Lara en Barquisimeto, Venezuela, la cadena ha evolucionado con ética, orientación al cliente, excelencia, humildad y compromiso como sus valores fundamentales. Esta rica herencia se ha mantenido a lo largo de los años, llevando a Farmatodo a expandirse a otros países como Colombia y Argentina, consolidándose como un referente internacional de confianza y compromiso con el bienestar de sus clientes.                                                         Autor Desconocido. Circa 1957                          |     Imágenes del libro: 100 años: Historia de lo posible Farmatodo: Hitos en Colombia y Compromiso con la Innovación Farmatodo ha dejado huella en Colombia desde 2008, inaugurando su primera farmacia en Bogotá, Britalia Norte (Calle 165). A lo largo de los años, ha evolucionado con hitos como el Centro de Distribución en 2012 y el servicio a domicilio en 2017. En 2022, alcanzó 82 farmacias y lanzó «Farmatodo Prime», un servicio exclusivo para sus clientes. En 2023, celebra 15 años de excelencia y abre su tienda número 100, demostrando su compromiso con la mejora constante. Beneficios Saludables de Nuestros Productos: Sin Gluten y 100% Horneados Nuestros productos, disponibles en Farmatodo, no solo deleitan tu paladar, sino que también aportan beneficios a tu salud. Las Achiras del Huila son libres de gluten, ideales para aquellos que buscan opciones sin esta proteína. Además, son 100% horneadas, garantizando un aporte nutricional óptimo para ti y tu familia. No solo es una delicia, ¡es una elección saludable! El Toque Picante a tu  Salud Física y Mental Próximamente, las Achiras picantes llegarán a Farmatodo para agregar un toque de emoción. Más allá del sabor, el picante puede brindar beneficios tanto para la salud física como mental. Desde estimular el metabolismo hasta mejorar el estado de ánimo, el picante en nuestras Achiras promete una experiencia completa para tu bienestar. Conoce más sobre los beneficios del picante en nuestro blog:  Achiras Picantes: Un Toque de Sabor que Potencia tu Salud Te invitamos a visitar tu Farmatodo más cercano y descubrir el mundo de sabores y beneficios que ofrecen nuestras Achiras del Huila. En cada tienda, encuentras no solo productos farmacéuticos de calidad, sino también opciones deliciosas y saludables que harán tu visita una experiencia completa.

  Las achiras, esos bocados crujientes y sabrosos que todos adoramos, son un verdadero tesoro de la gastronomía colombiana. Son un producto típico de la región andina de Colombia, y su elaboración es una tradición arraigada en varios departamentos, incluyendo Tolima y Huila. Sin embargo, para entender completamente la relación de las achiras con Neiva y su historia, es necesario dar un vistazo al contexto histórico que marcó la creación del departamento de Huila. El Pasado de Tolima Grande Hasta 1908, lo que hoy conocemos como el departamento de Huila era parte de un extenso territorio conocido como Tolima Grande. Neiva, la ciudad que luego se convertiría en la capital de Huila, fue un centro neurálgico en este territorio. Sin embargo, en ese año crucial, se produjo un evento trascendental en la historia de Colombia: la división del departamento de Tolima Grande en dos nuevos departamentos, Tolima y Huila.   Este cambio no solo tuvo un impacto administrativo, sino también cultural y gastronómico. La creación del departamento de Huila trajo consigo una identidad regional distinta y, por supuesto, una tradición culinaria única, en la que las achiras jugarían un papel destacado. Las Achiras y su Elaboración Las achiras, esas galletas deliciosas y crujientes que todos conocemos y amamos, son un producto típico de la región andina de Colombia. Se elaboran con una mezcla de almidón de sagú, queso y mantequilla, y se hornean hasta obtener esa textura perfectamente crujiente. Aunque hoy las asociamos con Huila y Tolima, la verdad es que las achiras son una delicia que ha sido apreciada en varios departamentos, como Nariño, Cauca y Boyacá. El Legado de las Achiras: Más Allá de las Fronteras La historia de las achiras nos demuestra cómo la gastronomía y la cultura se entrelazan y se adaptan a lo largo del tiempo. La división de Tolima Grande marcó el inicio de una nueva etapa en la historia de Neiva y Huila, pero también consolidó a las achiras como un elemento fundamental en la identidad gastronómica de la región. Hoy en día, las achiras son un tesoro culinario que trasciende las fronteras de Huila y Tolima. Se disfrutan en toda Colombia y más allá, llevando consigo la rica herencia de la cultura y la tradición culinaria de la región andina. Cada mordisco de achira es un recordatorio de esa rica historia y la diversidad que enriquece la gastronomía de nuestro hermoso país.  

La Sencillez en la Alimentación: Menos Ingredientes, Más Salud En un mundo donde la alimentación y la nutrición ocupan un lugar central en nuestras vidas, a menudo buscamos la simplicidad en nuestros alimentos. La premisa de que «menos es más» puede aplicarse a muchos aspectos de la vida, y la comida no es la excepción. La idea detrás de esta filosofía es que, cuanto menos procesados sean los alimentos que consumimos, más beneficiosos pueden ser para nuestra salud. Hoy, queremos explorar esta idea a través de un ejemplo excepcional: las achiras del Huila. Estas deliciosas y tradicionales galletas colombianas se destacan por su simplicidad en la lista de ingredientes, compuesta únicamente por cinco elementos: 1. Almidón de Achira: La base de las achiras, este almidón se extrae de la raíz de la planta de achira y le da su textura única. 2. Cuajada Fresca: Un componente esencial para el sabor y la suavidad de estas galletas. 3. Margarina: Agrega una agradable untuosidad y sabor a las achiras. 4. Yema de Huevo: Enriquece la mezcla con un matiz adicional de sabor y un toque de color. 5. Sal: El equilibrio perfecto para realzar todos los sabores. Este puñado de ingredientes, tan puro y simple como puede ser, se combina para crear un manjar que ha sido parte de la tradición gastronómica del Huila durante generaciones. La simplicidad en la lista de ingredientes de las achiras del Huila es una característica que las distingue. Al optar por alimentos con menos componentes, tendemos a reducir la exposición a aditivos y preservativos innecesarios que pueden ser perjudiciales para la salud a largo plazo. Además, la simplicidad suele ir de la mano con la frescura y la autenticidad, ya que los alimentos menos procesados tienden a retener más de sus propiedades naturales. Un Bocado de Tradición Las achiras del Huila son mucho más que un simple aperitivo; son un pedazo de historia y tradición. Hechas con ingredientes locales y siguiendo recetas transmitidas de generación en generación, estas galletas encarnan la esencia misma de la comida casera y la cultura culinaria de la región del Huila en Colombia. Dada su simplicidad y su perfil nutricional, las achiras del Huila pueden ser un complemento delicioso y versátil para tu dieta.

El Sabor Auténtico de Colombia: Achiras del Huila y Café, una Combinación Inigualable   Colombia, tierra de tradiciones y sabores únicos, es famosa en todo el mundo por dos tesoros gastronómicos que destacan por su autenticidad y exquisitez: las Achiras del Huila y el café colombiano. Juntos, forman una combinación que no solo es representativa de la cultura colombiana, sino que también deleita los paladares de quienes tienen el privilegio de probarla.   Las Achiras del Huila: Un Bocado Tradicional   Las Achiras del Huila son una delicia ancestral que se ha convertido en un emblema de la región del Huila, en el suroeste de Colombia. Estas crujientes galletas están hechas principalmente de almidón de achira, una planta típica de la zona. Su preparación es un arte transmitido de generación en generación.   Razones por las que las Achiras del Huila son Irresistibles: 1. Sabor Único: Las Achiras tienen un sabor inconfundible y adictivo. Su textura crujiente y su ligero toque de queso las hacen irresistibles. 2. Ingredientes Naturales: Hechas principalmente de almidón de achira, queso, sal y anís, las Achiras son un producto natural y sin conservantes artificiales. 3. Tradición y Cultura: Estas galletas tienen profundas raíces en la cultura huilense y son el resultado de siglos de tradición y dedicación. 4. Acompañante Perfecto: Su sabor neutral las convierte en un acompañamiento perfecto para otras delicias, como el queso fresco o un buen café. El Café Colombiano: Patrimonio Nacional El café colombiano es conocido en todo el mundo por su calidad y sabor excepcionales. Colombia es uno de los mayores productores de café del planeta y su café es famoso por su suavidad y ricos matices. Razones por las que el Café Colombiano es Inigualable: 1. Sabor Sofisticado: El café colombiano se caracteriza por su sabor suave y equilibrado, con notas de nuez, cacao y cítricos. 2. Variedad de Orígenes: Colombia cuenta con diversas regiones cafeteras, cada una con características únicas de sabor debido a su geografía y clima. 3. Cultivo Responsable: Los caficultores colombianos se enorgullecen de cultivar su café de manera sostenible y respetuosa con el medio ambiente. 4. Tradición Cafetera: La producción de café en Colombia es una tradición arraigada que ha pasado de generación en generación, garantizando una experiencia de café de alta calidad. La Combinación Perfecta: Achiras del Huila y Café Colombiano Cuando se unen las Achiras del Huila y el café colombiano, se crea una sinfonía de sabores y aromas que representan lo mejor de Colombia. La textura crujiente y ligeramente salada de las Achiras contrasta de manera excepcional con la suavidad y riqueza del café. Cada bocado de Achira realza las notas del café, mientras que cada sorbo de café acentúa el sabor de las galletas. Esta combinación no solo es un placer para el paladar, sino que también es un tributo a la cultura y la tradición de Colombia. Representa la pasión de un país por sus productos autóctonos y la búsqueda de la excelencia en la gastronomía. En resumen, las Achiras del Huila y el café colombiano forman una pareja culinaria perfecta que deleita a quienes tienen la suerte de probarla. Son un testimonio de la diversidad y riqueza de la cultura gastronómica de Colombia, y un recordatorio de que los mejores sabores a menudo provienen de ingredientes simples y naturales arraigados en la tradición.

En el vasto mundo de la gastronomía, la diversidad de sabores y aromas es una fuente interminable de placer. Entre los deleites culinarios, las achiras picantes; se destacan como una opción que no solo despierta los sentidos, sino que también podría brindar beneficios para la salud. En este blog, exploraremos el delicioso mundo de las achiras picantes y cómo su consumo moderado puede aportar a tu bienestar.   Las Achiras Picantes: Un Bocado de Sabor con un Toque de Fuego: Las achiras picantes son un clásico ejemplo de cómo los alimentos pueden ser una experiencia multisensorial. Estas delicias son un snack tradicional en varias culturas, elaborado a base de almidón y sazonado con especias que añaden ese característico toque picante. Su sabor único y textura crujiente han conquistado paladares alrededor del mundo, desde América Latina hasta Asia. Beneficios de la Comida Picante para la Salud   ¿Sabías que la comida picante puede tener impactos positivos en tu bienestar? Aquí te presentamos algunos beneficios que podrían sorprenderte:   Estimulación del Metabolismo: Los componentes picantes de las achiras pueden aumentar la tasa metabólica, lo que a su vez podría favorecer la quema de calorías y contribuir al control de peso.   Efectos Antiinflamatorios: Algunas investigaciones sugieren que ciertas sustancias presentes en los ingredientes picantes podrían tener propiedades antiinflamatorias, ayudando a reducir la inflamación en el cuerpo.   Mejora de la Circulación: El consumo moderado de alimentos picantes puede promover una mejor circulación sanguínea, contribuyendo a la salud cardiovascular.   Liberación de Endorfinas: ¿Alguna vez has sentido esa sensación de euforia después de comer algo picante? Eso se debe a la liberación de endorfinas, las «hormonas de la felicidad», que pueden generar una sensación de bienestar y alivio del estrés.   Propiedades Antioxidantes: Algunas especias utilizadas en las achiras picantes, como la pimienta de cayena, contienen antioxidantes que podrían ayudar a combatir los radicales libres y promover una piel más saludable. En definitiva, las achiras picantes no solo son un placer para el paladar, sino que también podrían brindar beneficios para la salud cuando se consumen con moderación. Como en cualquier aspecto de la vida, el equilibrio es clave. Disfrutar de estas delicias de manera consciente y responsable podría añadir un toque de sabor y bienestar a tu vida. Así que la próxima vez que te sumerjas en una bolsa de achiras picantes, recuerda que estás saboreando mucho más que solo un snack: estás explorando un camino hacia una experiencia culinaria y de bienestar única. ¡Buen provecho!

La Ruta de la Achira es una atracción turística que se lleva a cabo en Neiva Huila. Los visitantes, tanto locales como extranjeros, exploran 16 kilómetros del río Magdalena en una canoa, desde el embarcadero de La Gaitana hasta el corregimiento de Fortalecillas. Este encantador pueblo es conocido por la producción artesanal del delicioso y típico bizcocho de achira. Neiva, conocida como la capital del río Magdalena, ha sido reconocida como la primera ciudad capital ubicada a lo largo de la orilla del río. A lo largo de la historia y hasta el día de hoy, muchas de las actividades en Neiva están estrechamente vinculadas al Río de La Patria. Estas actividades incluyen procesos de conquista y colonización, luchas por la independencia, participación política en la era republicana, comercio, producción acuícola y generación de energía, entre muchas otras. Con la llegada del ferrocarril y más tarde con la construcción de carreteras para vehículos automotores, el río perdió gradualmente su importancia y los puertos cayeron en el olvido, algunos de ellos convirtiéndose únicamente en embarcaderos para la pesca artesanal. Sin embargo, en la ciudad de Neiva siempre ha existido un tránsito fluvial significativo hacia islotes y áreas de cultivo donde se produce plátano, yuca y otras frutas propias de climas cálidos. Estos viajes permitían a los visitantes observar la fauna silvestre, adentrarse en el bosque seco tropical y contemplar las actividades agropecuarias en los alrededores, incluyendo históricas haciendas ganaderas. Además, se suma a todo esto un elemento emblemático de nuestra gastronomía tradicional: el bizcocho de achira. Estos ingredientes se combinan para crear una ruta fluvial entre el centro urbano de Neiva y el pueblo de Fortalecillas, que incorpora toda esta simbología y se convierte en un producto turístico de gran interés. Al comienzo del recorrido, se atraviesa el Parque Isla en la ciudad de Neiva, pasando por la desembocadura del Río Las Ceibas, el histórico puente Santander, una importante obra de ingeniería, y el moderno puente que atraviesa la vía hacia Bogotá. A partir de ahí, el trayecto continúa por áreas de explotaciones agropecuarias y remanentes del Bosque Seco Tropical hasta llegar a Fortalecillas. En el Centro Poblado de Fortalecillas, se pueden visitar las fabricas artesanales de biscochos de achira, biscochos de maíz, panderos, galletas de dulce y otras colaciones y pan tradicional, allí se puede ver el proceso completo de amasijo, armado y horneado de los diferentes productos para luego ser puestos en el mercado. Algunos permiten la participación de los turistas en la preparación de estos productos. Hay también algunos recorridos de naturaleza al bosque seco tropical, a unos cerros en forma de ponqué y a balnearios del lugar.   Fuentes: alcaldianeiva.gov.co Huila.Trtavel

Harold Tejada Canacué no era ampliamente reconocido a nivel internacional hasta el 2020 cuando participo en el Tour de France. Los especialistas en ciclismo en Colombia estaban conscientes de las habilidades excepcionales de este ciclista de 26 años originario de Huila, y para muchos resultaba extraño que, a pesar de sus destacadas actuaciones, no hubiera dado el salto al World Tour, las competencias más importantes del ciclismo. Sin embargo, esto nunca lo desanimó en lo más mínimo: Tejada y su entrenador, David Vargas, tenían claro que la paciencia era clave. Sus habilidades estaban más que comprobadas. Desde los 6 años, y gracias al apoyo de su madre, Gladys Canacué, quien en ese momento era alcaldesa de Pitalito y promovía algunas escuelas deportivas, Harold desarrolló un amor por la bicicleta. Con su padre como entrenador, representó a Huila durante 8 años. Su talento era evidente. A los 14 años, se convirtió en el mejor corredor en la categoría Prejuvenil de la Clásica Nacional de Ciclismo 2011, a pesar de contar con poco apoyo y no formar parte de un club deportivo consolidado. Harold Tejada y su mamá Gladys Canacué en la Clásica Nacional de Ciclismo 2011. – Foto: Archivo Particular A los 16 años, gracias a David Vargas, Harold pudo experimentar un salto de calidad. Sin embargo, también fue un salto al vacío, ya que era un adolescente que dejaba su hogar para vivir en El Carmen de Viboral, en el oriente de Antioquia. Vargas, quien era entrenador de la Liga de Ciclismo de Antioquia y del Club de Ciclismo de El Carmen de Viboral, recuerda: «Vi a un joven que desperdiciaba muchas medallas en campeonatos prejuveniles. Siempre quedaba en quinto, sexto o cuarto lugar, por eso lo invité a unirse al Club».   Corría el año 2013 y Tejada era solo un adolescente, pero no se acobardó al llegar a un lugar nuevo que, tradicionalmente, ha impulsado a muchos ciclistas: «No fue fácil porque Antioquia es un departamento que tiene mucho talento, muchas promesas, y es complicado para alguien de Huila competir con los antioqueños», dijo Tejada en un video publicado en su Facebook justo antes del Tour de Francia. «Pero siempre tuve la mentalidad de ir a Antioquia y arriesgarme al todo o nada». En 2014, Tejada dio el salto al profesionalismo y desde entonces no ha dejado de tener actuaciones destacadas. Ese mismo año, en la Vuelta al Porvenir de Colombia, ganó una etapa y desempeñó un papel crucial para que su compañero de equipo, Brayan Hernández, se llevara la clasificación general. Un año después, en 2015, volvió a desempeñar un papel importante en el título de Julián Cardona.   Aunque Harold no quedó en primer lugar, su papel siempre era determinante, lo que hizo que fuera deseado por los equipos antioqueños. Según cuenta Vargas, aunque Harold era sub-23, siempre desempeñaba un papel de apoyo crucial para sus compañeros élite. Vargas notó en varias ocasiones que Harold se angustiaba al ver cómo otros ciclistas de su misma edad ya competían en carreras en Europa. Campeonato Nacional de Ciclismo (Cortesía FCC) – Foto: Federación Colombiana de Ciclismo Pero todo cambió en 2019. Después de destacadas actuaciones con los equipos Orgullo Paisa y EPM, Harold se unió al Team Medellín, donde se fijó un objetivo: ganar el Campeonato Nacional Sub-23, ya que sería su último año en esa categoría. No había duda sobre su capacidad. Ganó tanto la prueba de Ruta como la Contrarreloj. Además, ayudó a Fabio Duarte a ganar la Vuelta a Colombia. Dos semanas después, estaba corriendo en el Tour de l’Avenir en Francia, donde ganó una etapa y confirmó su contrato con el Astana a partir de enero de 2020. En ese momento, afirmó: «Astana no se equivocó al confiar en mí».   Y sin duda, el equipo Kazajo no se equivocó. En su debut este año en el World Tour, Harold tuvo un desempeño brillante en el Desafío del Mont Ventoux. En esa ocasión, no solo fue un gregario clave para la victoria de su compañero Alexander Vlasov, sino que también logró terminar en sexto lugar. Luego, brindó apoyo al ruso en su victoria en el Giro de la Emilia Romagna y, finalmente, acompañó al danés Jakob Fuglsang, quien se llevó el primer lugar en el Giro de Lombardía. Fue gracias a estas actuaciones que el equipo decidió incluirlo en la lista para el Tour, a pesar de que inicialmente no estaba previsto.   En el Tour, Harold tiene claro su papel: «Debo acompañar a Miguel Ángel (López) en la montaña, esa es mi tarea principal». Hasta ahora, ha cumplido su papel de manera sobresaliente: Supermán nunca ha estado solo en la montaña y todavía está luchando por el podio en el Tour junto a un ciclista huilense que, como un buen gregario, ha logrado permanecer bajo el radar para cumplir su objetivo de la manera más precisa posible.     Fuente: Semana.com