Si ha comido achiras notará un delicioso sabor crujiente, que es distinto a la mayoría de snacks en el mercado, el secreto se debe porque la materia prima para la fabricación de este afamado bizcochito no es el maíz sino otra harina de origen vegetal llamada sagú.
En Colombia esta harina se ha usado para hacer panes, arepas e incluso buñuelos, es decir que puede reemplazar el trigo o el maíz, o complementar cualquier otra harina. En su forma vegetal es una planta de hojas grandes y aplanadas, de su interior se extrae un tubérculo del que después del proceso de cocinado y rayado se obtiene el almidón.
gelatina o postres, se ha evidenciado que este alimento ha sido crucial para la recuperación de distintas enfermedades en las cuales se necesita subir de peso, pues se consume aproximadamente 350 calorías por cada 100 gramos de porción.
Se ha relacionado el consumo de harina de sagú con índices bajos de colesterol y de triglicéridos, además tiene una cantidad mínima de potasio que nos puede ayudar a solucionar problemas de presión arterial, disminuyendo la tensión general en el sistema cardiovascular. Cuando hay problemas digestivos o de inflamación en el estómago, se recomienda alimentación a base de sagú, ya que es fácil de digerir. Como tiene una pequeña cantidad de fibra, puede acelerar aún más el proceso digestivo y ayudar a equilibrar el ambiente bacteriano en el intestino.
Te invitamos a consumir nuestras achiras que están hechas 100% de sagú de origen natural libre de gluten y grasas trans. ¿Qué te pareció este blog? ¿Conocías el sagú?